viernes, 17 de julio de 2015

La historia de mi parto (tercera parte y final)


Ya está aquí el desenlace de la historia. El momento más maravilloso de mi vida a pesar de todo lo que os vengo a contar ahora, ya que fue el comienzo de una nueva vida, no solo la de Monete, también la mía, que cambió por completo todo mi mundo.

Pues como os contaba en la Parte II yo ya no podía con mi cuerpo, el dolor había pasado a ser de otra forma que nada tenía que ver con lo anterior que había vivido.
Cuando entraron las enfermeras (por fin) y me miraron, se dieron cuenta de que ya había dilatado por completo.

"¿Cómo no te va a doler, si estás de 10 centímetros?" me dijeron...  pero a mí me sonó más a "Pues va a resultar que no se quejaba por gusto y le dolía de verdad"
Veía que se acercaba el final y que por fin podría conocer a mi hijo y tuve otra inyección de energía que no se muy bien de donde salió, pero ahí estaba.
Me doblaron las piernas y las abrieron (yo no podía, a pesar de notar dolores las piernas no eran parte de mí) me dijeron que cada vez que notase una contracción empujase con todas mis fuerzas para que el niño fuese bajando y se fueron.

Y a ello me puse, contracción... pujo, contracción... pujo... y le preguntaba a mi marido ¿se ve algo?
Mi marido no veía nada, o no quería mirar, no lo se muy bien. Yo tenía una especie del miedo a que el niño saliese disparado.
Venían de vez en cuando, me miraban y me decían "muy bien, sigue empujando, luego venimos"

Pasado un rato, no se si 1 hora o 10 minutos, decidieron que me llevaban a paritorio. ¡Por fin!
Sacaron la cama de la sala de dilatación, y ahí estaba, la cama de partos (o potro de tortura) y una luz enoooooorme dispuesta a ser el primer fogonazo que viese mi hijo al asomar la cabeza.

Tuvieron que ayudarme entre 2 a subir a la nueva cama, seguía sin sentir NADA las piernas y sorprendentemente, no se por qué, dejé de sentir dolor. Luego lo hablé con mi marido y nadie había tocado el suero, la anestesia... nada. No conseguimos entender por qué dejé de sentir dolor. Tal vez al moverme el catéter se colocó, quien sabe...
Me colocaron las piernas que pesaban toneladas en unos "reposa piernas" y se iban para todos los lados.
Me incorporaron un poco y me explicaron que tenía que sujetarme con las manos a una agarraderas laterales para empujar con mas fuerza.
Mientras, mi marido se ponía la bata fuera. La puerta estaba justo frente a mí, lo primero que se veía al entrar era... mi vagina en todo su esplendor. Y entró mi marido... y miró... y abrió los ojos cómo platos y le vi palidecer.
Se acercó a darme la mano y le dije que, ya que él podía, viese nacer a nuestro hijo. Que se fuese donde estaba la acción. Y allí se colocó.

"Se le ve el pelo" le leí en los labios. Y yo me emocioné y desee con todas mis fuerzas verle por fin.
Empujaba cuando me lo pedían, cuando la maquina pitaba, yo seguí sin sentir nada.
Me esforzaba todo lo que podía pero según ellas "si sigues empujando así no va a salir nunca".
Sentía que no podía hacerlo mejor, pero lo volví a intentar y de mi garganta salió un gruñido por el esfuerzo.
"No gruñas que pierdes fuerza" esos eran los ánimos que recibí.
De repente entró en el paritorio un hombre alto, vestido de verde y se asomó a ver que se veía entre mis piernas. Según me contó mi marido me metió media mano y tiró hacía abajo.
Hablaban entre ellos (las 2 mujeres que asistían mi parto y él). Querían saber la posición de mi hijo. Decían que si la nariz estaba arriba, que no que abajo que mira la fontanela...

El hombre de verde me miró y me dijo... "yo creo que te quedan unos 20 pujos si sigues así, hazlo mejor y vamos a conseguir que sea en 10".


"Hago todo lo que puedo pero no siento la mitad de mi cuerpo"
le contesté. Y se fue.

Entonces le dijeron a mi marido que se echase a un lado. Ya eramos 7 en el paritorio contando a mi marido y a mi.
1 matrona y 1 MIR entre mis piernas.
2 enfermeras o auxiliares (no lo sé) sujetandome las piernas.
Una señora también uniformada, sentada al lado de la puerta, mirando de vez en cuando que pasaba entre mis piernas y leyendo una revista.
Mi marido y yo.

Matrona - Te voy a hacer un cortecito
Yo - ¿Es necesario?
Matrona - Si, vamos a evitar desgarros. Tranquila que no pasa nada.

Una vez más, ya había perdido la cuenta de cuantas, me dejé hacer.
Y otra vez a empujar y aquello no avanzaba. Entonces la MIR habló algo con la matrona, cogió un taburete y se puso a mi izquierda. Se subió en él y me dijeron "vamos a ayudar un poquito a tu hijo a bajar" y automaticamente me vino a la cabeza "Maniobra de Kristeller" y me derrumbé.
Definitivamente había perdido todo el control de mi parto, el poco que me quedaba.

Raquel se llamaba, es el único nombre que se de todas las personas que estuvieron en mi parto. Es la única que se presentó. Una MIR que pasaba a verme de vez en cuando a la habitación y controlaba el monitor. Una chica joven que cuando me llevaron a paritorio me dijo que se acababa su turno pero que se quedaba a ver nacer a mi hijo (y a asistir el parto).
La única que me trató cómo a una persona individual y no cómo a un número de historia.

Y se subió sobre mi y debió ver el miedo en mis ojos, y me metió el codo bajo las costillas, extendió el brazo y a modo de rodillo fue empujando mi barriga, con mi hijo dentro, muy suave.
Lo volvió a hacer 3 veces, realmente no dolía, solo su codo me molestaba un poco, de vez en cuando me volvía a mirar a los ojos y yo la miraba agradecida por no hacer fuerza para empujar a mi hijo.

Fue entonces cuando la matrona decidió que Raquel no tenía fuerza. Que se bajase del taburete.
Y entró otra MIR (ya eramos 8, aquello parecía el camarote de los Hermanos Marx pero sin nada de gracia) la que me había atendido esa mañana en urgencias al llegar.

Cogió el taburete y lo puso a mi derecha, mi marido seguía viendo el pelo de mi hijo y me miraba un poco descompuesto pero con ojos tranquilizadores.
Y entonces sí dolió, sentí el codo clavarse en mi barriga, en mis costillas, sentí la presión de su brazo arrastrando a mi hijo hacia fuera. Dejaba caer su cuerpo sobre el mío para hacer más presión y yo cerraba los ojos mientras oía que me decían "empuja, empuja".
Durante esos momentos eternos entró de nuevo el señor de verde.
Con tono de humor le dijo a una de las enfermeras/auxiliares "¿Una Kristeller? Que eso está prohibidooooo" y le faltó añadir "pero nosotros hacemos lo que nos da la ganaaaaa"
Le miré, no se cómo, pero solo quise matarle por tomarse a la ligera algo tan terrible. Lo debió notar, no pensaba que le iba a escuchar y lo hice. Mi miró y se fue.

2 veces me hizo esta maniobra, exhausta miré a mi marido, sonreía, mi hijo tenía la cabeza fuera.
Con un gesto me hizo saber que traía una vuelta de cordón. Se lo quitaron y le dijeron a mi marido que se pusiese a mi lado, ya no podía estar viendo nacer a nuestro hijo.
Me abrieron el camisón dejando mi pecho al descubierto y me pidieron un último empujón.

Y así lo hice, empujé todo lo que pude y de entre mis piernas apareció un bebe enorme! MI HIJO, por fin.
Me lo pusieron sobre el pecho, piel con piel, los 2 desnudos. Mi marido y yo nos miramos, "Gracias por este regalo" le dije. Miré el reloj que había en la pared, las 22:10.

No lloraba, gemía, muy bajito. Le besé la frente, le cogí los deditos de la mano izquierda. Me impregnó con su olor, con su calor, estaba cubierto de lanugo, resbaladizo.
Y le cogieron, "solo 1 minuto" para hacerle el test de Apgar y pesarle.
Hacían apuestas, ¿cuanto creéis que pesa?
Fueron 4,020 kgs. Era tan grande! Con un pelo negro largo. Yo sólo quería que me lo pusiesen sobre el pecho otra vez.
Y me lo trajeron y le volví a besar. Gemía y le dije "No llores mi vida, mamá está aquí"
Entonces se me acercó una enfermera y me dijo "No llora, es que le cuesta respirar, le vamos a llevar a neonatos para que le vean los médicos"

Se paró el mundo. No supe que decir.
Miré a mi marido "vete con él". Le cogió en brazos y se fueron a neonatos que estaba cruzando el pasillo de las salas de dilatación.

Me desinflé, me sentí caer por un precipicio. Sólo quería terminar con aquello e irme con mi hijo.
Salió la placenta, "¿Puedo verla?" y me la enseñaron, y no di crédito. Tan grande.

Yo seguía sin notar nada, no solo en las piernas, en todo mi ser. Me faltaba algo, mi hijo.
Me dejé hacer, me cosieron (me cosió Raquel) usaban distintos colores de hilo, imagino que para cada capa de tejido. Debió ser un buen corte. Pregunté cuando puntos llevaban, me dijeron que no lo sabían. En el exterior fueron 3 puntos pero se que por dentro hubo muchos más.

Y me llevaron a otra sala, a recuperarme, tenía que estar allí al menos una hora me dijeron. Sola.
No había otras mujeres, nadie se estaba recuperando de su parto.
Pedí beber algo y por fin! Un zumo. Me supo a gloria.

Me quitaron la sonda, me tomaron la tensión, temperatura etc... y me volvieron a dejar sola.
De repente entró mi marido. "¿Donde está? ¿Que le pasa? ¿Que le han hecho?"

Durante 1 segundo por mi mente pasó el peor de los desenlaces. ¿Qué hacía mi marido sólo, donde estaba mi hijo?
Me contó que le estaban viendo los médicos, que no me asustase, que tendría que quedarse en neonatos para observarle. Me enseñó fotos, era precioso, grande, parecía que tenía 1 mes!!

Después me dijeron que tenía un NEUMOTORAX y NEUMOMEDIASTINO.
Para que lo entendáis mejor "El neumomediastino se presenta con aire extraluminal dentro del espacio mediastínico, mientras que el neumotórax se presenta con aire en la cavidad pleural que provoca colapso pulmonar. Son espontáneos cuando ocurren sin antecedente de traumatismo o enfermedad pulmonar subyacente".

Se necesita un traumatismo para que aparezcan ya que son extraños los casos espontáneos.
Me estuve documentando después, estoy convencida de que todo fue a causa de la maldita KRISTELLER.
Pero la Kristeller no aparece en la historia de mi parto.

En fin, con el niño en neonatos y yo en recuperación, la familia, que esperaba fuera, no pudo vernos a ninguno.
Mi marido les enseñó fotos del pequeño en la cuna y se marcharon a casa.

Y a mi me subieron a planta.
A una habitación compartida, con una madre con su bebé recién nacido. Y la cuna que había al lado de mi cama, vacía.
Yo no podía más, quería ir a ver a mi hijo (4 plantas mas abajo) pero me dijeron que no podía bajar hasta la mañana siguiente.
Al rato entró un enfermero.

Enfermero - ¿Y tu niño?
Yo - En neonatos, no podía respirar al nacer.
Enfermero - ¿Vas a bajar a verle?
Yo - Me han dicho que hasta mañana no puedo, que aún estoy con los efectos de la anestesia y que debo descansar.
Enfermero - ¿Tienes hambre? Ha sobrado una cena. Puré y filete de ternera. Y un flan!
Yo - Si por favor, me muero de hambre y de sed.

Me trajo la cena, eran pasadas las 12 de la noche. Además me trajo 1 litro de zumo de naranja que me bebí casi del tirón.
Y me dijo... "¿Si te traigo una silla de ruedas y te subo en ella, te bajas a neonatos a estar con tu hijo?"


"Claro!!! Por favor, si"
le dije. Y así me bajó mi marido las 4 plantas que nos separaban a mi hijo y a mi. Con todos los puntos recién cosidos, la anestesia desapareciendo y un agotamiento brutal.
Pero todo se me olvidó al verle, dormido, en una cuna, con una sonda y con oxigeno.

"De momento no es conveniente que le des el pecho, no debe hacer esfuerzos, por eso le hemos sondado y tiene oxigeno, si quieres puedes usar un sacaleches y le vamos dando lo que te saques"

Le cogí en brazos y le miré, le contemplé, le desgasté con los ojos. Me enamoré, algo despertó en mi, algo que cada día que pasa es más fuerte.
Y así fue mi parto, nada salió como yo esperaba, nadie me respetó cómo hubiese deseado.

Monete estuvo 4 días ingresado, me pasé los 3 días post parto en neonatos. Hospital arriba, hospital abajo, por las noches, por esos pasillos eternos. Me regañaban porque cuando me llevaban las comidas nunca estaba en mi cama. Porque tenía que dormir un poco me decían.
Me dieron el alta, pero mi hijo se quedó ingresado. Yo quise quedarme con él pero mi cuerpo decidió que no podía más. Me tuve que ir esa noche a casa a dormir.
Por suerte al día siguiente le dieron el alta y comenzó nuestra nueva historia, la que escribimos cada día.
Y a pesar de que la lactancia la dí por perdida en el mismo momento que me dijeron que no podía ponerle al pecho, todo ha seguido su curso y llevamos 26 meses de lactancia a demanda.

Eso lo contaré algún día, lo duro que fue no contar con apoyo médico para dar el pecho, la mala información, las trabas... Y lo bien que sale todo cuando una está informada y sabe lo que quiere.


Muchas gracias por leerme y por la paciencia esperando capítulos.




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36 comentarios:

  1. Estaba deseando terminar de leerlo y hasta he llorado! No hay derecho a que te hagan eso, nos pillan en un momento delicado y se aprovechan de nuestra vulnerabilidad. Por suerte no fue grave y te llevaste el mejor regalo. Un besazo guapa

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    1. Si Eulália, es para llorar. Pero bueno, de todo se aprende y aunque no creo que vuelva a tener hijos, el conocimiento es poder!
      Y si puedo contar esto, seguro que a alguien le sirve para que no le hagan lo mismo.
      Gracias por leerlo! Un besote

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  2. Que Historia! Triste por ese parto no respetado, pero bonita por el después. Ese bebé, la parte de ti. A mi también me hicieron la maniobra Kristeller.. Y mande un email a "el parto es nuestro" para que documentaran mi caso. Te aconsejo hacerlo tu también. Por que aunque ellos no lo pongan en el historial nosotras sabemos que pasó, y que no somos las únicas! Hay muchísimas más!Un besote enorme!

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    1. Hola Ana!

      Yo hice una encuesta para El Parto es Nuestro en referencia al parto pero sobre todo por el tema Kristeller.
      Pero el parto al detalle no se lo he contado, pero es buena idea!
      Me lo apunto para hacerlo.
      Un beso fuerte.

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  3. ¡¡¡Ay cómo he llorado leyendo tu parto!!, aquí estoy con las lágrimas cayéndome... ¿por qué lo hacen todo tan complicado?, ¿por qué esa falta de respeto y de información?, en fin...

    Qué buena la imagen del bebé saliendo disparado con tus pujos, jeje.

    El mío también nació grandote y también estuvo en neonatos. Nunca en mi vida había llorado tanto como esas horas que pasé separada de mi peque.

    Al menos ahora están bien, el tuyo y el mio. Un besazo.

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    1. Ay que os he hecho llorar y no era mi intención!
      Se pasa muy mal cuando de repente te separan así de tu hijo, al que acabas de conocer y con todo lo que has tenido que soportar para tenerle en brazos.
      Lo importante es eso, que ahora están bien. Pero siempre me quedará la duda de que hubiese pasado si hubiese tenido un parto respetado...
      Un beso guapa!

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  4. Qué lágrimas me has sacado.... Qué historia! Cuanto siento que te pasara eso... Solo me alegro de que esteis todos bien y juntos ahora. Besos

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    1. Gracias Virginia!!
      Tenía que contarlo, siento haberos hecho llorar. Eso es porque lo entendeis a la perfección.
      Un besote.

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  5. Me he sentido identificada con la historia de tu parto.
    En mí caso sólo la atención , el cariño , la comprensión que recibí en mi segundo parto hicieron que los traumas que tenía del primer parto desaparecieran .En mí primer parto mi hijo tuvo que ser reanimado , entró en parada cardiorespiratoria.Hoy ,es un niño feliz.

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    1. Que duro pasarlo tan mal en tu primer parto, con reanimación y todo.
      Me alegra de que hoy sea un niño feliz, como dices, y que tu segundo parto fuese tan bueno.
      Gracias por pasarte y comentar.
      Besos

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  6. Qué simpáticas las comadronas no? Es curioso lo de la anestesia igual es lo que dices que al moverte se moveria el cateter o alguna cosa estará aprisionada y se soló.Y lo del olor..Es verdad ese olor que tienen los bebés recién nacidos...aquella parte más primitiva de m´dice que nunca se puede olvidar... Feliz semana

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    1. Si, simpatiquísimas. Fueron todo amor las muy hijas de... ayyy.
      Lo de la anestesia, misterio.... y lo de el olor... increible.
      Cómo se graba a fuego en la memoria!
      Un besote Montse.

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  7. Madre mía Olga, me he emocionado y cabreado a partes iguales con tu parto. Si me cruzo ahora mismo con el señor de verde te juro que una ostia no se la quita nadie. ¿¿¿No respetan a la madre y encima con cachondeito??? Gggrrrrrr. Me alegro que por lo menos todo acabara bien y ahora tengas contigo a Monete. Un besazo guapi.

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    1. Al de verde le hubiese matado allí mismo, lo juro.
      Menudo payaso.
      Pero si, a pesar de todo, Monete salió del hospital y no hubo más problemas derivados del neumotorax y lo demás.

      Gracias preciosa. Un beso

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  8. Vaya historión! Es tan triste que un momento único, porque es único, acabe tan manipulado y desvirtuado. Es verdad que todo salió bien, pero, ¿y si no? Yo estoy segura de que parte de los problemas de Rodrigo, parte, se deben a negligencia en el parto. Pero no tengo manera de demostrarlo. Como dices, la mitad de las cosas nos e reflejan en el historial. Enhorabuena por tu hijo y gracias por compartir este pedazo tan íntimo de tí con nosotros. Mil besos

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    1. Me robaron mi parto, es así.
      Ya me habias dicho alguna vez que sosprechas que parte de los problemas de Rodrigo vienen por mala praxis. Es terrible que oculten todas las maniobras que se practican en paritorio, que sea vox populi y sigan llendose de rositas. Me hierve la sangre nena.
      Gracias por leerlo. Muchos besos.

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  9. Me ha emocionado mucho tu parto y se ha parecido al mío en el final que también se llevaron a mi hija a neonatos donde estuvo una semana. Tb seguimos 24 meses de lactancia a demanda! La separación al nacer fue difícil pero con el tiempo, contacto, lactancia... Nos reconectamos! Un abrazo y gracias por compartir tu historia

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    1. Me alegra que te sientas identificada y cómo me gusta leer eso de que sigues con la lactancia a pesar de la semana que estuvo en neonatos.
      Yo siempre digo que el que quiere, puede! Y a la vista está.
      Gracias por pasarte por el blog y comentar.
      Un abrazo

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  10. pufff se me han puesto los pelos de punta. Por desgracia no tengo hijos ni nunca podre pero al leerte me has puesto en tu piel por completo, esa lucha y ganas de ver a tu hijo, el "sentirte vacia". Menos mal que todo acabo bién y disfrutas del peque
    ¡ besotes !

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    1. Si nena, es un sentimitiento que te come por dentro.
      No sabría expresarlo, sólo me pasa con él. Nunca antes lo había sentido.
      Un abrazo muy fuerte Aida!!!

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  11. Uf por donde empiezo..se me han saltado las lagrimas cuando el enfermero te dijo lo de la silla, de ser yo,le habría besado ahí mismo . Entiendo que quieran que descanses,pero no tienen corazón al pensar que puedes aguantar una noche entera, que mas les da dejarte bajar? Es problema tuyo si estás agotada, solo quieres ver a tu hijo.
    De la Kristeller no se si hablar, estoy hasta los huevos de esas maniobras. Por suerte en el mio no tuve maniobras ni intervenciones, ni tan si quiera epidural. Siempre me he quejado de que me la quería poner y no pude, y ahora leyéndote, doy gracias por como ocurrió todo, porque las hay que lo habeis pasado mucho peor y encima os han separado de los bebes.
    Piensa ya solo en tu hijo, hacia adelante, en el muchacho de la silla de ruedas, que me ha caído bien jeje, y en raquel, que tambien te trató como a un ser humano. Y a los demás que les den dos duros. Lo que no entiendo es porque no aparece la kristeller en el historial, debería de aparecer todo lo que tenga que ver. Pero tirar de la manta solo servirá para traerte malos recuerdos. Eres una gran mamá, muy valiente.Tu hijo estará super orgulloso ;)

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    1. Gracias por tus palabras!
      La verdad es que las palabras del enfermero fueron como ver la luz al final del túnel. Fué un encanto.
      La Kristeller no aparece en la historia del parto porque está desaconsejada por las OMS y si encima el bebé o la madre sufren consecuencias por hacerla... se buscan la ruina.
      Aunque quisiese tirar de la manta no podría demostrar casi nada.
      Me quedo con que he vivido la experiencia y siempre que puedo cuento mi caso por si puedo ayudar a que las demás, en un futuro, se nieguen a que les hagan estas burradas.
      Un beso preciosa!

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  12. Se me saltan las lágrimas al leer tus entradas.Si bien no tuviste el parto que imaginabas,sin duda, el postparto ha sido todo tuyo.¡¡¡Enhorabuena por 26 meses de LM exitosa!!! Yo tuve cesaría programada y 8horas a la fierecilla en la incubadora (también problemas respiratorios-quejido- es lo q tiene que el ginecólogo decida el cumpleaños de tu hija) y aún con esas, alta a las 72 horas y LM sin problemas (siempre que no hablemos de las dificultades de encontrar pediatras informados/as en el tema)!Si es que las de la teta somos tremendas!!!!;oP

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    1. Es tremendo cuando una quiere dar la teta no hay quien se interponga.
      Lo malo es cuando no tienes las cosas claras y te vienen los pediatras a desinformarte...
      Por suerte aprendí mucho de lactancia durante el embarazo (gracias a Internet y grupos de lactancia) y tenemos una lactancia maravillosa.
      Un besote fuerte!

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  13. Hola Olga,

    Qué pena que te robaran el parto, con la buena pinta que tenía desde el principio.
    Y una pregunta que si te parece indiscreta no me contestes ¿has pensado en denunciar lo ocurrido?.
    Creo que no debemos quedarnos impasibles ante talos malostratos.

    Por suerte los hijos curan todas nuestras heridas.
    Un abrazo.

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    Respuestas
    1. Hola!
      Pues te diré que tarde en darme cuenta de que no habían sido normal todo lo que me hicieron. De hecho a día de hoy me sigo lamentando y arrepiento de no haberles parado los pies.
      Pensé en denunciar pero en la historia aparece un parto divino y sin complicaciones ni maniobras.
      ¿Cómo demuestro yo lo que ocurrió allí?
      Un abrazo!

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  14. La fragilidad de ese momento tendría que ser respetada. Te entiendo perfectamente y no tengo otra forma de solidarizarme que con este comentario pero soy de las primeras en levantar la bandera de un parto respetado. Y también entiendo que en ese momento no tenemos la lucidez o la experiencia para saber si el procedimiento es o no el adecuado, sin embargo, comenzar por contar la historia es una forma de que otras mujeres estén prevenidas. Bienvenida a Intensional, un placer tenerte con nosotras. Besos!

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    Respuestas
    1. Hay tal falta de respeto en tantos partos que de le ponen a una los pelos de punta.
      Hay que darlo a conocer para que, como bien dices, otras estén prevenidas.
      Un placer ser Intensional. Estamos en contacto.
      Besos!!!!!

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  15. He leído tu parto y he recordado el mío,inducción a la 41+ 3, oxitocina sintética, epidural y parto vaginal con episotomia y 4 horas separada de Rosquis sin justificación alguna, a mi me tenían que coser y a él se le llevaron a pediatría y no lo traían a la habitación. Sufrimos de violencia obstetricia y de un parto no respetado. Lactancia de 23 meses, muy a su pesar...besitos!

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  16. Me he leído todo el parto del tirón! Que mala suerte tubiste con el personal...pero que majo el enfermero que te dejó bajar. Como dices es una pena que deshumanicen tanto el parto. Un buen susto te llevaste, pero bueno lo importante es que al final todo fuera bien!! A mi me lo provocaron por preeclampsia y acabo en cesárea, así que nada de lo que me imagine se cumplió...saludos!!

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  17. Una historia preciosa.

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  18. He estado leyendo mucho de tus entradas. Las del embarazo y ahora estas, las de tu parto. He de contarte que lo he ido haciendo poco a poco a ratos en el trabajo. Pero este último en especial, he tenido que ir parando voluntariamente, porque el nudo que tenía en la garganta iba a desencadenar en lágrimas delante de algunos de mis compañeros!
    Ha sido un relato, duro, muy duro, pero muy emocionante, estoy totalmente... estoy con ganas de llorar de la emoción, de llorar por compartir tu felicidad.
    Felicidades Guerrera!

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    Respuestas
    1. Muchísimas gracias por tus palabras.
      Fue duro pero la recompensa enorme y aquí sigo, disfrutando ella.
      Un besote y gracias por leer y comentar!

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  19. Dos años hace ya que escribiste tu historia... y como he llorado al leerte.

    Ole por ese enfermero que te trajo la silla de ruedas para que pudieras ver a tu monete <3

    Y gracias por compartir algo tan personal y bonito :*

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  20. En 2013 tube un parto muy parecido , la misma maniobra y aparte forceps , al mes que se me desincho mi vagina me di cuenta que no me cocieron el corte que fue grande interno y externo 😢 . La mejor parte fue que solo estubo una hora con oxigeno el bebe y cuando salia a verlo casi me caigo desmayada y me lo traian .

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